Puede
representar la alimentación.
Puede simbolizar el aprovechamiento de los recursos que mantendrán el fuego encendido en un proyecto, idea, objetivo o relación actual.
Nos recuerda que en la vida existen muchos momentos amargos que, sin embargo, resultan inapreciables para la salud del cuerpo, del alma o de los negocios.
Pueden simbolizar cosas pequeñas que te sobrevuelan, que se ciernen sobre ti, te asedian y te molestan.